Será que por ir a contracorriente
hemos acabado mirando en la misma dirección,
que mientras la gente nos llenaba de excusas
tú y yo solo pensábamos en besarnos,
que justo cuando el mundo se quedaba sin palabras
nos llenamos la boca con acentos de otro mundo
y en cierto modo lo salvamos
-nos salvamos-,
y nos dio a nosotras en compensación.
Será que me levantaste la mirada del suelo
mientras tú mirabas al cielo
y el choque fue algo así como implosionar
pero de ti para mí,
y viceversa.
Será que me acariciaste así,
como si fuera de mi cuerpo
terminarán los límites de esta ciudad,
y quise quedarme a vivir en tus manos
más de lo que dura un beso.
Será que no nos esperábamos
y por eso ahora no nos vamos,
porque lo bonito de todo esto
es ver que la sorpresa sigue ahí
cuando abres los ojos.
El ruido de las llaves, de Philippe Claudel
-
Durante unos años, más o menos en la treintena, Philippe Claudel fue
profesor en una prisión preventiva. Allí impartió talleres a los reclusos.
Todo e...
Hace 7 horas
8 comentarios:
No voy a decirte una vez más que hipnotizas. Merde, ya lo he dicho.
Mmm escucha " será" de Rafa pons, te hará bien, te gustará
Impresionante! de verdad. No tengo más que decir. Me voy de tu blog con el alma de puntillas.
Un abrazo
Pestañear y seguir viendo la sorpresa.
Bravo, Elvira.
Y perdurar en la magia de esa sorpresa, con viejos trucos y malabarismos de altura...
y percibir en la confirmación de un beso que no es un sueño, que seguimos adelante... él y yo
amo tu blog♥
Increíble la conexión que generas :3
Dios mío ...donde has estado o donde estaba yo que aún no te había encontrado hasta ahora...me enredo en tu poesia❣️
Publicar un comentario