viernes, 1 de febrero de 2008

Evanescente

El aire se infla con tu voz, tus suspiros empañan mi mirada y tus ojos avivan mis recuerdos, haciendo temblar hasta mi sombra. Recorro la tuya con las yemas de mis dedos y recojo el rastro de tus huellas, que melódicas bailan con mi cuerpo. Preguntas un porqué y te respondo un cómo. Y quiero contarte todos tus roces a los que quise dar forma con mi piel, y todos los susurros que acaricié hasta que se deshacieron en mis manos. Narrarte tu risa, versarla y retratarla como si de un amanecer se tratara. Y sentir uno a uno los latidos de tu mirada, deleitando tu sonrisa, escribiendo mi alma.

3 comentarios:

___Reminiscencia___ dijo...

Idem.
un abrazo.

Gaby

T S dijo...

pase aqui para leerte una vez mas, como el prometido, me quede entre tus lineas y siempre me hallo cuando las vuelvo a leer...
un fuerte abrazo, sigue escribiendo...

Larrey dijo...

Uf, muy interesante, pero ¿podías cambiar los colores? se complica la lectura.
Por cierto, os invitamos al II concurso de suspiros del trastero:
http://eltrasterodelaimaginacion.blogspot.com/
Os dejo el cuento ganador del año pasado: "¿crees que podremos resistir tanto dolor?. El silencio de sus ojos le dijo que no. Se abrazaron a la foto de su hijo y se dejaron caer"